Siempre he creído que una de las grandes fallas de la educación ambiental es poner sobre los hombros de cada persona una inmensa carga de culpas; el material ‘educativo’ suele estar cargado de mensajes que al final hacen que te quede muy claro que eres un depredador, un destructor del planeta, un irrespetuoso, un egoísta y un miope entre otras muchas cosas.
Ser el Frankestein del planeta al principio era preocupante para muchos, luego se convirtió en algo molesto y lamentablemente ahora es divertido para muchos más. Es decir, la estrategia no está funcionando…
Así que para evitar decirles que este 2012 tienen que salvar a todo el planeta, o que tienen que luchar con ahínco para evitar que sus hijos vivan en un mundo árido habitado por clones hambrientos, o que si siguen gastando agua morirán de sed tirados bajo una hiedra seca o peor aún que por culpa de todos el mundo ya se va a acabar, mejor les dejo lo que podrían ser sus 10 propósitos de Año Nuevo para complicar menos la historia de su relación con este planeta llamado Tierra.
De regalo de Año Nuevo compra varias bolsas de tela reusables y prácticas. Además de ayudar a disminuir la cantidad de basura no reciclable verás que esa molesta maraña de bolsas plásticas desaparecerá de tu cocina y serás más feliz y como ‘plus’ te darás cuenta que cargar la compra en estas bolsas de tela es más fácil y cómodo pues su asas no suelen gangrenar dedos como las de plástico.
Antes de encontrarle un lugar a todos los regalitos que llegaron a casa en esta temporada desocupa otros lugares donando, regalando o vendiendo cosas que ya no uses más.
Separa basura en tres fracciones (al menos). Si eres de los reacios que se niegan a hacer esto, pues al menos separa lo reciclable del resto, es una tarea sencilla.
Elige un producto de los que sueles adquirir y hazte la firme propuesta de este año comprar ese mismo producto pero en su versión orgánica, en la ecológica o en la de comercio justo. Puedes cambiar a lechuga orgánica, a jabón para ropa biodegradable, a café justo, el coche por bici.
Visita los comercios cerca de casa y las ferias o mercados que se instalan por ahí con el objetivo de descubrir qué cosas puedes adquirir en tu misma colonia o barrio en vez de ir a los grandes supermercados.
Lee las etiquetas de todo lo que compras y recuerda la regla de oro: entre menos ingredientes, mejor.
Este año, haz que tus fiestas sean menos contaminantes, no uses desechables de poliestireno expandido, genera menos basura, gasta menos luz.
Intenta volverte parte de una ONG, de una asociación de vecinos, de una causa altruista o de un voluntariado.
Cada vez que vayas a comprar algo: piénsalo dos (o más) veces. Piensa si ya tienes muchos de esos productos, si realmente lo necesitas, si es útil, si es de calidad o será basura muy pronto, si lo compras sólo para sentirte mejor, si lo quieres sólo porque todos tienen uno…
Lee al menos dos libros este año.
No te concentres en cambiar de la noche a la mañana, no te angusties por salvar al planeta, simplemente aprende a disfrutar las cosas de la vida que están ahí de forma natural, que no cuestan dinero; aprende a disfrutar el contacto con la gente que te rodea, con tus vecinos, con los comerciantes locales; procura en todo momento estar en contacto con la realidad de tu país, eso te hará sensible a todas las causas justas y buenas. Busca ser feliz con una vida simple, la sustentabilidad vendrá por añadidura.
Fuente: http://sebuscanciudadessustentables.blogspot.com
Todo contenido vertido en este sitio es meramente informativo, como una herramienta para poder contribuir a mejorar algunos aspectos y así incrementar tu calidad de vida. Si te interesa ampliar la información del mismo, te sugerimos buscar la ayuda de un experto en el tema o bien en Google.
Código QR para este post
Short Link de este post http://bit.ly/uufx5a